El padre gijonés condenado por violar a sus hijas podría haber simulado un suicidio para huir de España

El vehículo que utilizaba y con el que huyó de Gijón para evitar ser juzgado por segunda vez por hechos casi idénticos, fue hallado en la carretera antigua a Santander. Un lugar de paso en el que era evidente que no iba a tardar en ser encontrado.

Cuenta con una condena de 25 años de cárcel por violar a una de sus hijas y no se presentó al juicio que tenía previsto celebrarse en la Audiencia Provincial por agredir sexualmente a su otra hija. Por esos hechos la fiscalía solicita para él una condena de doce años de cárcel. El individuo se encontraba en prisión provisional a la espera de que la sentencia de 25 años de prisión fuera firme.

Los días posteriores a la aparición del coche en Llanes se desplegó un importante operativo de rastreo en el que participaron la Guardia Civil y Bomberos de Asturias, por tierra, mar y aire. Se peinó la costa, los acantilados y también el Mar Cantábrico en busca de alguna pista. No hubo ni rastro. Tampoco los días posteriores en otros puntos de la cornisa cantábrica o en la costa francesa.

De forma paralela a ese rastreo, la Audiencia Provincial ha dictado una orden de búsqueda y detención. Las fuerzas de seguridad del Estado tratan de reconstruir sus pasos y determinar si pudo haber huido a Francia, como sospecha su entorno. Entre otros aspectos, se realiza un seguimiento de sus cuentas bancarias y también del posicionamiento de su teléfono móvil, así como la toma de declaración a los familiares del prófugo.

En el momento en el que supuestamente se cometió la agresión sexual a su hija (los cargos por los que aún no ha podido ser juzgado), la niña apenas tenía seis años. La situación se habría prolongado durante aproximadamente cuatro años.

Los dos casos de agresiones sexuales a sus dos hijas de corta edad se tramitaron por causas penales separadas, ya que ambas denuncias se presentaron en tiempos distintos por sus respectivas madres. Las menores son hijas biológicas del procesado, pero de madres diferentes.

El juicio por el que fue condenado a 25 años de cárcel se celebró el año pasado y la condena está pendiente del recurso ante el TSJA.